Los Mapas y la Historia
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El barrio no es sólo un lugar físico que pueda destruirse con buldozers, altas rentas o cucarachas doradas que se apropien de las casas. El Barrio son las relaciones entre un grupo de gentes que hablan el mismo idioma y gustan de la misma comida, son las alianzas por la sobrevivencia en un espacio físico; pero también mental, son los intereses que se comparten para el bien de todos, es la música, el folclore…
Sin lugar a dudas los mapas continúan siendo importantes piezas del pensamiento, pues tienen la capacidad de cambiar nuestra perspectiva del mundo. Hasta no hace mucho, un mapa se definía como una representación gráfica y métrica de una porción de territorio generalmente sobre una superficie bidimensional -o esférica si se trataba de un globo terráqueo-. Gracias a las nuevas tecnologías, principalmente las comunicaciones satelitales y el internet, la representación gráfica impresa en algún tipo de papel, ha quedado fuera de uso, y hoy día son imágenes tridimensionales interactivas de una precisión muy alta.
Un mapa es sobre todo es un documento que aporta información en diferentes planos proporcionales a la escala. Se sabe que en occidente, los babilonios (hacia el 2300 a.C.) elaboran los primeros mapas de que se tenga historia. Tales de Mileto elaboró el primer mapamundi en el que se concibe al Mundo como un disco que flota sobre las aguas. Aristóteles, Eratóstenes y Ptolomeo imaginaron sus propios mundos, lo mismo que pintores y poetas de otroras épocas. Dos instrumentos fundamentales para la precisión de los mapas, son el cuadrante y la brújula que se inventan en la Edad Media. Estos permiten medir los ángulos respecto a la estrella polar y el Sol, los cuales a la vez permitieron determinar la posición de un punto en el globo; su latitud y su longitud.
Los mayas creían que el planeta era circular y flotaba sobre la espalda de un cocodrilo. El testimonio más antiguo en América de escritura cartográfica pictográfica prehispánica, es el Códice Colombino y procede de la cultura mixteca de la Costa del Pacífico en el estado de Oaxaca; está elaborado en piel de venado. Los chinos los trazaban en seda, y los europeos en papiros. Fueron muy útiles para el diseño de tácticas de guerra, la construcción de naciones y delimitar propiedades.
Américo Vespucio, quien comenzó a trazar los mapas de sus viajes por el continente una vez instalado en Sevilla (1508). Tanto Solís, Pinzón, Juan de la Cosa contribuyeron con sus expediciones al trazado de los primeros mapas de los que se tiene conocimiento sobre el Continente Americano.
La tecnología digital del Siglo XX, condujo a otra revolución en la cartografía. Disponiendo de satélites, computadoras, monitores, GIS, trazadores, impresoras, escáneres remotos, documentos digitales y trazadores estéreos analíticos, junto con los programas de visualización -proceso de imagen, análisis espacial, y bases de datos- hicieron más que accesible la nueva cartografía. “Se denomina cartografía a un conjunto de documentos territoriales referidos a un ámbito concreto de estudio”. Como es el caso de los mapas de este proyecto.
Hoy en día basta con visitar Google en nuestro teléfono y tenemos la locación exacta en la punta de los dedos. Gracias a los mapas virtuales digitales tenemos una mejor idea de nuestro planeta, nuestra ciudad, nuestro barrio. Los taxista hace uso de ellos todo el tiempo para llegar a su destino sin siquiera conocer el área. Lo mismo un turista que puede acceder a lugares incógnitos sin problemas y a tiempo. Gracias a los mapas digitales, que lo mismo existen para guiarnos, que para aprender de historia, de población y de lo que se les ocurra, como es el caso de los mapas –presentes en este número especial de Hola Cultura referentes a Housing- elaborados en compadrazgo con la Universidad de Maryland y su equipo de expertos en el área.
En la antigüedad, se le llamaba al hacedor de mapas, un cartógrafo y era una profesión parte viajero, parte geógrafo, parte aventurero, parte dibujante. Hoy en día básicamente se necesita de una computadora, un GIS, algo de conocimiento en torno a las coordenadas geográficas, una señal satelital y un buen cúmulo de data.
DC Latino History and Affordable Housing proyecto, no hubiera sido posible sin la participación de expertos en diferentes áreas que fueron coincidentes en este proyecto de impacto social.
Usando la entrevista persona a persona, nuestros interns de verano, pudieron platicar con los residentes latinos de Adams Morgan y Mount Pleasant, y conocer sus historias; además de documentar el “barrio latino”, fotografiarlo y conocer en torno al pasado de nosotros, en esta parte de la ciudad, cuya población está cambiando a pasos agigantados gracias al fenómeno de la “gentrification”.
En este número encontrarán todo el “data” que recolectamos, esperamos les sirva y lo disfruten.
—Alberto Roblest
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