By hola | Published | No Comments
Es un buen ejemplo de lo que puede hacerse con materiales reciclables –pomposamente hablando-, para crear obras de arte de gran impacto. Basura encontrada en el mar, en las playas, dentro de los ríos, cerca de las montañas, de los bosques y dentro de los bosques, o los ojos de agua. ¿Qué son los regalos después de abiertos? Después de sacar los objetos de sus cajas y más temprano que tarde, todo es basura; todo lo que se encuentra en las oficinas, en los centros comerciales y en nuestras casas, está destinado a ser basura. Esta es la premisa de la que parecen partir los artistas de este Show. Magdalena Correa, Alejandro Duran, Mandy Barker, Tony Capellan, Blue Curry, Vik Muniz, Federico Uribe y Simon Vega.
La exhibición Planeta de un sólo uso es un comentario en torno al cuánto y al cómo hemos destruido nuestro planeta en aras de la comodidad, pero también de la avaricia, la mezquindad y la miseria. Por supuesto abunda el plástico integrado en las instalaciones. Una de las piezas luce como una cápsula lunar por dentro, aunque por fuera no es sino una casucha del Tercer Mundo; elaborada con láminas, palos y cosas recogidas e integradas a la vivienda, en un alunizaje forzoso dentro del capitalismo. Del techo de la galería, un mundo elaborado con chupones pende como un ahorcado multicolor. De una fotografía en gran formato -documentación hecha por el artista-, la basura roja se desparrama por el piso de la galería. Chupones viejos, sandalias, pedazos de computadora, de objetos y productos comerciales, comestibles y del baño and beyond.
Las cifras que acompañan la exhibición son apabullantes: 8 millones de toneladas de plástico se arrojan al mar año con año y hoy en día existe la espeluznante cantidad de 5 trillones de partículas de micro plástico en el océano; mismo que es ingerido por los animales y lo que eso significa.
Obviamente el objetivo de la exhibición es concientizarnos en torno al grave problema de la contaminación, el uso del petróleo y sus derivados, y como consecuencia la destrucción de las especies, los ecosistemas y la vida en general de esta nuestra casa. El globo terráqueo, representado ahora como un viejo balón de fútbol, arrojado por el mar como basura; un planeta tratado con los pies, pateado y consumido.
Estas piezas en efecto son hermosas, pero tristes a la vez y deprimentes y patéticas, cómo fueron los resultados de la conferencia en Madrid en torno al medio ambiente, como es la actitud de muchos en este mundo, de algunos países y corporaciones. Con la exhibición Planeta de un sólo uso el IDB celebra sus 60 años de existencia.
En fin, buen fin de año y modérense con los regalitos, un abrazo grande y extendido a tod@s.
Planeta de un sólo uso, IDB Cultural Center, 1300 New York Avenue, NW., Washington DC 20 577.
Alberto Roblest