Entrevista: los alebrijes
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Los alebrijes son figuras mágicas, fantásticas, representaciones de seres únicos propios de la imaginación. Sabemos también que es un arte manual muy importante y de mucha tradición. En todo el estado de Oaxaca muchas familias producen alebrijes, pero los pueblos de San Martín Tilcajete y San Antonio Arrazola, son los principales productores de estas fantásticas creaturas. En la actualidad el Taller de Jacobo y María Ángeles participa en un importante renacimiento de la cerámica con el fin de aprender una actividad que los antepasados zapotecas realizaban cotidianamente, así como desarrollar un nuevo oficio en su tierra natal.
El día de hoy tenemos una entrevista con los maestros Jacobo y María Ángeles originarios de San Martín Tilcajete, ubicado en los Valles Centrales de la región de Oaxaca. Esta entrevista viene a colación pues la semana pasada estos artesanos mexicanos dieron una conferencia magistral virtual a unos 50 alumnos de los talleres de español impartidos a través del sistema de bibliotecas de Montgomery County.
1.HC ¿Qué son los alebrijes?
Los nahuales para nosotros son nuestros animales fantásticos, nuestros espíritus, elaborados de madera de copal, la cual para nosotros es un árbol sagrado, que nos da la resina que quemamos en los rituales y ceremonias, y que también usamos para pintar. Nuestros tonas y nahuales están basados en la cultura zapoteca, el cual cuenta con un calendario compuesto por veinte animales, y cada niño al nacer recibe sus dos animales protectores, que se fusionan, razón por la cual la gente les llama alebrijes.
2. HC ¿Por qué casi siempre son figuras fantásticas y seres de la imaginación?
Porque cuando nace un niño, y se fusionan dos animales es uno solo, la gente lo ve como algo fantástico y hermoso, por lo cual nosotros hemos venido haciendo una representación, tratando de que estas piezas tomen un poco de vida con el movimiento, los colores y las formas.
3. HC ¿De dónde viene esta tradición artesanal?
Viene de nuestra cultura zapoteca, al ser originarios del Valle de Ocotlán en los Valles Centrales del estado Oaxaca, tenemos el sincretismo mexicano donde adoramos a la parte católica y prehispánica, en este caso los elementos y los animales. Para nosotros son más que sólo una artesanía, son seres espirituales, nuestros animales protectores, los cuales hemos logrado llevar a una calidad de arte.
4. HC ¿Cuándo empezaron ustedes a hacer alebrijes? ¿Es una tradición que viene en la familia?
Nuestros antepasados ya hacían artesanía, pero no la vendían. Fue en los años 80’s cuando se comenzaron a comercializar, por ejemplo, mi padre y mi abuelo vendían su artesanía en el zócalo de Oaxaca, y después, en mi generación me tocó difundirla a nivel nacional e internacional; una de las cosas de las que nos sentimos orgullosos es que esta familia ha contribuido en poner a los alebrijes en el lugar en el que actualmente se encuentran, y darles valor, que pasaran de ser un souvenir a ser una forma de arte.
5. HC ¿Cuál es el proceso y cuánto lleva la elaboración de una pieza?
Cada pieza puede llevarse desde quince días, un mes, seis meses hasta un año, dependiendo de la calidad del decorado, el tallado, la expresión; si son piezas de un sólo pedazo de madera se llevan seis meses solamente en el secado y tres meses para pintar. Se pueden trabajar en escala para poder tener piezas de diferentes tamaños, dependiendo de los proyectos de cada quién. Hay familias que se dedican solamente a hacer armadillos, otras que solamente hacen coyotes o en el caso de nosotros, hacemos todos los animales del calendario zapoteca.
6. HC ¿Háblenos de su taller en Oaxaca, ¿Tienen aprendices y estudiantes?
Gracias a Dios en esta región son aproximadamente 16 pueblos los que nos han tenido confianza, jóvenes a los que les gusta el arte, se acercan a nosotros para pedirnos una oportunidad de enseñarles esta técnica. Durante estos 25 años hemos formado muchísimos jóvenes y no paramos de enseñar, ya que siempre estamos innovando. En los últimos diez años, hemos implementado diversas disciplinas dentro del taller como lo son las incrustaciones de piedras preciosas en nuestras piezas, aplicación de hoja de oro, entre otros, y hemos llegado a hacer nuestro arte en grandes formatos, llevando nuestras colecciones a diferentes partes del mundo para que se pueda apreciar y valorar más el arte oaxaqueño. Actualmente tenemos dos líneas, una de ellas es la utilitaria, como la vajilla, y otra es la escultura. Por lo tanto, hemos ido diversificando, para beneficio del público y del cliente, diferentes formas de arte, para que cuando vengan a visitarnos en el taller, no solamente vengan a ver nuestros tonas y nahuales, sino que puedan ver nuestra plástica, joyería, cerámica, y otros proyectos en los que hemos estado trabajando estos últimos años. Por otro lado, con el paso del tiempo nos dimos cuenta de que la materia prima es primordial, por lo que también desarrollamos un proyecto de bio-conservación, implementando una investigación, en donde el principal objetivo es preservar el árbol de copal, germinar su semilla, logrando que la materia prima se renueve, gracias a las reforestaciones que llevamos a cabo año con año desde hace ya 20 años, una práctica que queremos inculcar también a otras comunidades, el respeto al medio ambiente.
7. HC ¿Cuál es la motivación para mantener viva esta tradición?
El orgullo de la cultura zapoteca, ya que antes de ser mexicanos, somos zapotecos oaxaqueños, entonces poder compartir nuestra cultura con el mundo es lo que nos mantiene con esta energía para poder seguir promoviendo la riqueza de nuestro estado.
8. HC ¿Algo que quisieran agregar maestros?
Agradecemos mucho el interés a la Revista Hola Cultura por aportar estos granitos de arena para fortalecer las sociedades del mundo, en donde la gente pueda aprender de otras experiencias que sirvan a otros para poder generar ecosistemas, respetar y germinar esta semilla de la cultura en el mundo, ya que mucha falta nos hace, sobre todo en este momento, por el confinamiento por el que estamos atravesando, muchos han perdido la fe, sin embargo, la ecología siempre es una buena terapia, plantar un árbol es generar vida y eso es algo muy bonito ya que generamos un pulmón en cualquier parte en donde nos encontremos. Nuevamente muchas gracias por la oportunidad y los esperamos con los brazos abiertos en Oaxaca.
Jacobo y María Ángeles: Somos creadores de figuras zapotecas talladas en madera a las que llamamos Tonas y Nahuales conocidas mundialmente como alebrijes. Con 25 años de experiencia, el taller fue fundado en el año de 1994. Por si visita Oaxaca la dirección del taller es Callejón del Olvido #9. San Martín Tilcajete, Ocotlán, Oaxaca.
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