Skip to content

¿Cómo es vender comida en la calle bajo el calor extremo de D.C.?

By | Published | No Comments

*Read in English

Cientos de jóvenes, niños y personas mayores caminan a diario la milla y media entre el Columbia Heights Civic Plaza y la escuela primaria John Lewis NW., por la calle 14. En ese tramo, las personas se topan con escasos árboles y los que hay son pequeños y ofrecen poca sombra, aumentando la sensación de bochorno en cada paso que dan.

Tal es el caso de María Gabriela, vendedora de comida ambulante, quien dejó Columbia Heights en mayo de este año para establecerse en las afueras de la estación de Fort Totten, quien dice, “Sentía que me quemaba en la Columbia, por eso me fui a la estación de metro de Fort Totten.”

María Gabriela vendiendo tamales en Columbia Heights (foto por/photo by Ana Ugarte)
María Gabriela vendiendo tamales en Columbia Heights (foto por Ana Ugarte)

María Gabriela emigró de El Salvador para poder darle una mejor vida a sus tres hijos. En este país centroamericano, emprendió diversos trabajos, como vender ropa usada, maquillaje y comida. En Estados Unidos, trabaja día y noche.

“Parte de la tarde y noche trabajo en cocina en un restaurante y en las mañanas me defiendo vendiendo tamales,” dice María Gabriela.

Según el Sistema Nacional Integrado de Información de Salud sobre el Calor, Washington D.C. y muchas partes del país han batido récords de calor diarios. El National Weather Service recomienda cancelar actividades al aire libre en horas del día, pero, ¿se imaginan decirle esto a quien gana la mayor parte de sus ingresos vendiendo en las calles? 

Para los vendedores de Columbia Heights ha sido un reto vender en la zona. Por eso, usan gorras, protector solar o sombrillas para cubrirse del sol. Aunque se exponen continuamente a altas temperaturas, para ellos es más importante llevar sus ganancias a casa.

Estación del metro de Fort Totten
Estación del metro de Fort Totten

María Gabriela decidió trasladarse a la estación de Fort Totten. Este ha sido un mejor punto de ventas, el metro cuenta con un techo más amplio, además son cientos de personas las que suben y bajan sobre estas líneas. 

Columbia Heights es una zona transitada, sin embargo, esto podría cambiar, debido a la falta de árboles. Las personas tienden a buscar un lugar seguro y, cuando se enteran de que esta es una de gran zona calor, la evitan.

María señala que los vendedores ambulantes siguen en busca de un punto más conveniente para su salud. 

“A mí, en la estación de Fort Totten, el sol me ataca menos.”

Obtenga más información sobre cómo las altas temperaturas del verano en Washington, D.C. afectan a los residentes locales en nuestro podcast, “The Climate Divide.” ¡Permanezca atento a la temporada 2 que llegará este otoño!

– Artículo de Ana Ugarte

Editado por Rafaella Mufarech