By hola | Published | No Comments
*De nuestra gustada sección: LEER DC. Nuestras RESEÑAS de la Biblioteca Pública*
Para aquellos a quienes gustan de las historias de vaqueros, el western, los pueblos medio vacíos, las balaceras y todo en un ambiente de rancho, El Chinola Kid es su novela. Excepto que aquí los bandidos son tipos de baja estofa manejando armamento de alto calibre, camionetas equipadas y vehículos todo terreno.
La trama, como en las películas de vaqueros, gira en torno a un sheriff que quiere imponerse en el pueblo para que todo mundo actúe bien, respete la ley y sea un paraje digno; no digamos ya una tierra de provecho, en lugar de un pueblo triste, fantasmal y lleno de maleantes que hacen lo se les da la gana. ¿Les suena? Por supuesto que sí, ahí andamos justamente.
Como parte del género que se ha denominado en México narco-literatura, y qué básicamente es un tipo de literatura que se escribe en el norte del país, este es un western contemporáneo donde por supuesto no hay caballos, búfalos, ni indios salvajes a quien matar. El sheriff, claro está, es un ex soldado del mal que se ha reformado.
“Este pueblo se está muriendo. Necesita ser operado de urgencia por un doctor que sepa hacer su trabajo. Hay que removerle unos tumores muy grandes que no lo dejan ser”.
Este libro, que de principio a fin se va y se va hasta que uno llega al final con una gran sonrisa en la boca, es un texto bastante interesante por la forma en cómo el autor utiliza los lugares comunes y el kitsch, para hacerse de una trama contemporánea, pero a la vez con remembranzas de las películas del oeste y los héroes del celuloide.
“¿Qué diría su abuelo de la vida que lleva? ¿Acaso no le sirvieron de nada todas aquellas películas de comisarios incorruptibles transmitidas por el canal local? Cintas como Río Bravo con John Wayne; Duelo de titanes con Burt Lancaster; La pasión de los Fuertes con Henry Fonda; Armado hasta los dientes con Robert Mitchum; A la hora señalada con Gary Cooper?
El Chinola Kid, de Hilario Peña, es una novela hilarante, llena por supuesto de chicas de escultural cuerpo, en ocasiones de no tan buen corazón, aunque siempre con un alma pura; un sheriff con ética como los que había antes y que hoy en día escasean bastante en los diferentes pueblos donde se dicen ejercer la ley; y vaqueros contra narcos en un pueblo cuyos habitantes se esconden ante los fuereños por miedo a ser casados por algún arma larga importada de los Estados Unidos.
Todo sucede cuando al personaje principal, Rodrigo Barajas, le ofrecen el trabajo de ser Sheriff, una vez que él ha desertado de las filas del crimen, y le puede tanto la responsabilidad de aquella placa que trae pegada en el pecho que se hace bueno, y hace respetar la ley, arriesgándose contra los malosos que siempre estarán dispuestos a llevar al caos y a la tristeza a cualquier sitio, y a cualquier país donde los criminales ganen y actúen.
Chinola Kid, Hilario Peña, ediciones Random House Mondadori, 2012.