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La serie “El gabinete de las curiosidades” es una antología de pequeñas historias extrañas, ocho filmes de una hora producidos por el mismísimo Guillermo del Toro, aunque dirigidos por ocho diferentes directores, todos ellos maestros del género.
El gabinete de las curiosidades es un mueble con muchos cajones, algunos con doble fondo, triple, cajones que rechinan al abrir y se cierran súbitamente, dan vuelta y giran, un objeto gigantesco como de un otro siglo en el que Guillermo del Toro atesora sus secretos, sus temores, sus pesadillas y malos encuentros, pero también sus fantasías, sus proezas, y sus revelaciones.
La serie, como muchas de las cosas que produce Netflix, tiene bastantes altibajos, y algunos de los programas resultan inadecuados, facilones y hasta infantiles. Los ocho directores incluidos en la antología imprimen libremente cada uno su propio estilo, enfoque y punto de vista, además de diferentes manejos de cámara, de música y de efectos, así como las múltiples habilidades para concluir su cuento. Historias que frecuentemente concluyen con un giro macabro, inesperado y generalmente, aunque nos siempre, con una moraleja.
Guillermo del Toro -como un moderno Alfred Hitchcock, o mejor aún, un Rod Serling creador de la famosa y aclamada The Twilight Zone-, haciendo gala de histrionismo, nos presenta cada título y nos da la introducción a la atmosfera de cada filme, explicando a grandes rasgos cuál es el tema del programa en cuestión. “El gabinete de las curiosidades” es sin duda un homenaje a los dos maestros ya mencionados, e incluye varios géneros, tales como fantasía, misterio, ficción distópica, suspenso, terror, drama sobrenatural, y thriller psicológico.
Particularmente disfrute del primer programa titulado “Lote 26” y del último de la serie titulado “El Murmullo”, quizá porqué ambos programas me parecieron los con mejor historia y más redondos en términos de narrativa visual. El resto de los ocho episodios que conforman la serie, pues más o menos la llevan, quizá porque son demasiado sosos, en alguna otra vez con un tono infantiloide más que juvenil; con calaveritas que salen de aquí, por allá, y cositas me dio efectistas del terror contemporáneo que en ocasiones resultan cursis y yermas. Con nombres como “Las ratas de ultratumba”, “Sueños en la casa de la bruja”, “La autopsia” y “El otro lado”, estos programas caerían en la categoría de filmes B, y algunos ya en la línea con C, por decirlo de alguna forma.
Guillermo del Toro acaba de ser condecorado con la Summa cum laude de la universidad Nacional de México por el conjunto de su trabajo, principalmente aquellos filmes clásicos ya de la cinematografía mundial como “El espinazo del diablo”, “El laberinto del fauno” y “Hellboy”. Guillermo del Toro, cómo sabemos, es tan bien dibujante y muchas veces el realiza sus propios storyboards, o guiones gráficos de sus filmes, además escribe historias por supuesto de terror, de misterio, de crimen, de fantasmas, y de cosas extrañas y poco conocidas que suceden en el mundo, o en el otro mundo, que para Guillermo del Toro no es muy diferente y a veces la diferencia entre ambos desaparece.
La serie es recomendable para un fin de semana con mucha lluvia, permite palomitas, hot dogs, y todo lo comercial que se les pueda ocurrir. Puede consultarse en Netflix y en otras plataformas en línea.
“El gabinete de las curiosidades”, 8 episodios. Guillermo del Toro. TV Series, 2022. Netflix.
Alberto Roblest